SOMOS SOBREVIVIENTES
¿Cómo se narra el abuso? ¿Cómo se rompe el secreto que el abusador impone con amenazas? ¿Cómo se habla de un dolor y una verg ¼enza que la mayoría de las veces ocurre dentro de la familia? ¿Cómo se cuenta que alguien ha sido sometido por un padre, una madre, un hermano, un abuelo, un vecino? Este es un libro incómodo, habla de la violencia ejercida por adultos contra menores de edad que dejaron marcas y condicionaron sus vidas. Habla de situaciones difíciles que ocurrieron en infancias que no fueron cuidadas, en las que se abusó de su confianza, de su integridad física y de su salud mental. Ocho escritores escucharon a ocho sobrevivientes de abuso y contaron sus historias desde un lugar de empatía y de denuncia con la mejor herramienta que poseen: la palabra. Ahí donde el silencio es cómplice del abusador, la palabra es aliada de las víctimas. Las historias reflejadas en esta antología permiten ver más allá de lo silenciado, conectando dolores solitarios con el dolor común, en una invitación a dejar de callar y animarnos a soñar juntos con un futuro más luminoso. «Sentí mucha verg ¼enza: yo me había casado con esta bestia. De pronto soy esa nena y todos mis demonios me rodean, me dañan, me atomizan.» Claudia Aboaf habla con Silvia «Blas no es de hablar mucho [...]. Pero después de un tiempo sí, empezó a hablar. Antes de la denuncia, y antes de las amenazas [...]. Habla Blas. Dice encierros. Dice toqueteos. Habla de violencia física.» Félix Bruzzone habla con G. «Yo de chica fui abusada por un vecino. [...] ¿Y a quién le iba a decir en ese momento? Lo que esperaba todo el mundo era que mi papá abusara de mí o de alguno de mis hermanos, y no pasó. Pero este vecino sí.» Gabriela Cabezón Cámara habla con Nadia «Varias veces papá quiere entrar a mi cuarto, sigue convencido de que puede hacerme lo que quiere, grito antes que pueda ponerme una mano encima [...]. Mamá lo sabe y no hace nada.» Juan Carlos Kreimer habla con Tatiana «El psicólogo le preguntó su nombre, qué edad tiene , etc .....